23 de abril de 2010

(Hay) DE MÍ


La estática de zonas invisibles que colindan con mis neuro-patologías, degeneran en un ritmo dinámico despistado y proliferante.

Mi lanzamiento corpóreo se fragmenta en pedacitos comprimidos, pero vacíos, y rebasan suavemente,

cada cierto tiempo,

cada cuanta idiotez aparece, me rodea.

He aquí “yo”, y - “el yo” - que lejano se siente.

¿Pero cómo redunda en tantas repeticiones amorfas del ser?... la redundancia, mi sola contingencia que espera y parece “estar” plastificada de una forma, sin catálogos, sin ánimo de exhalar.

Abrir y salir de inmediato. La consigna del decepcionado, del inerte.

Me acepto, me autodetermino, presiono el botón. Te presiono, te determino y te cancelo.

.



15 de abril de 2010

Para-éxodo

Volver a mí, a esa naturaleza intrínseca de gozar la incertidumbre y retratarme como una paradoja. Ésta misma soy yo, y no es que tenga un dilema temporal y concreto. Es que soy un arrojo al vacío, y me cubro de “lleno”.

De vez en cuando, en cada salto aspiro a un paréntesis: que tiene en cada extremidad una espina transversal. Un poco irreverente. Otro poco ineludible.

Armarme.

Atarme.

Anclarme.

…Mi éxodo plutónico y satírico,

De la finalización cotidiana, hacia el empapelamiento dialéctico...

¿Por qué negar que adoro pisarme los talones?, me da un placer fatídico envolverme de sensaciones angustiadas, de su propia intimidad.

.-